Los cuentos entregan a los niños, jóvenes y adultos ideas, seguridad, confianza y transmiten valores, ayudan a mejorar la memoria, a estimular la imaginación, conocer nuevas palabras y expresiones y valorar el entorno en el que se desenvuelven. Esto es precisamente lo que “Cuentos para antes y después de lavarse las manos” busca y genera a partir de su lectura.
En estos cuentos a través de entretenidos viajes que nos llevan a una feria, dentro del cuerpo humano o a un laboratorio vemos como conceptos como lactobacilos, microorganismos patógenos y alimentos van integrándose bajo el paraguas de la inocuidad de los alimentos y se presentan como un creativo y original material educativo para acercar a niños y adultos al mundo de la ciencia de los alimentos.