Marcela Reyes, académica del INTA y encargada de la presentación de la investigación sobre edulcorantes no calóricos.
Hoy se realizó de manera online la presentación de resultados del Proyecto FONIS SA219|0128: “Consumo de edulcorantes no calóricos en lactantes, preescolares y adolescentes de ingreso medio-bajo después de la implementación de la Ley 20.606 Sobre composición nutricional de los alimentos y su publicidad: descripción y recomendaciones” La actividad fue organizada por Asistencia Técnica INTA, Universidad de Chile Colegio de Nutricionistas Universitarios de Chile A.G. y la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo.
Los edulcorantes no calóricos (ENC) (sucralosa, sacarina, aspartamo, etc) surgieron como una alternativa a la alta ingesta de azúcares. Los ENC se caracterizan por tener poco o ningún contenido calórico y por presentar mayor intensidad de dulzor en comparación al azúcar de mesa. Aunque su consumo es recomendado para personas con obesidad o diabetes mellitus, actualmente su uso ha aumentado por parte de la población en general.
De acuerdo al estudio presentado por la directora del proyecto, académica del INTA, e investigadora del Centro de Investigación en Ambientes Alimentarios y Prevención de Enfermedades Crónicas asociadas a la Nutrición (CIAPEC), Marcela Reyes, la evidencia es controversial en relación a algunos de sus efectos positivos en la salud, como el control de peso y de los niveles de glucosa en sangre. Además, se ha planteado que el consumo de los ENC en el tiempo podría tener efectos negativos, incluso en relación a niveles inferiores sobre la Ingesta Diaria Admisible (IDA). En este contexto, de acuerdo a lo señalado por Marcela Reyes, es relevante monitorear la ingesta de ENC en población infantil, por ser la infancia un periodo crítico donde la exposición a diversos factores puede condicionar los hábitos y el desarrollo de una enfermedad futura.
En el marco de este proyecto de investigación se realizó un diagnóstico de situación frente al uso de ENC en alimentos y la ingesta de estos aditivos por preescolares, escolares y adolescentes, además de los cambios de estos indicadores tras la implementación de la Ley de etiquetado en Chile. En base a este diagnóstico, se propusieron recomendaciones de acciones para prevenir el consumo excesivo de ENC en población infantil, las que fueron evaluadas por un panel de expertos y expertas.
Constanza Miranda, médico veterinaria, encargada de evaluación de riesgos del área de Análisis de Riesgos de ACHIPIA.
El seminario contó, además de la presentación de resultados de la investigación, con una mesa redonda conformada por tomadores de decisión y académicos y académicas de distintas áreas. Constanza Miranda, representó a la Agencia Chilena para la Calidad e Inocuidad Alimentaria, la académica Salesa Barja a la Pontificia Universidad Católica y los académicos Tito Pizarro y Adens González a la Universidad de Santiago. Todos ellos comentaron los resultados de la investigación y manifestaron como conclusión la importancia de realizar una política pública en torno al tema.
